Guía # 2
Transformar la disciplina — enseñar en lugar de castigar

Introducción

Durante años, la disciplina se entendió como control o castigo. Pero cuando miramos la infancia desde la neurociencia y la conexión emocional, descubrimos algo poderoso:
la disciplina no es algo que hacemos “a” los niños, sino algo que hacemos “con” ellos.

Disciplinar con amor es enseñar habilidades, autocontrol y empatía.
Cada interacción es una oportunidad para ayudar a nuestros hijos a desarrollar su cerebro y a convertirse, con el tiempo, en mejores amigos, hermanos e incluso, algún día, mejores padres.

Guía # 1
Cómo las experiencias moldean el cerebro de nuestros hijos

Introducción

Cada experiencia que viven nuestros hijos deja una huella en su cerebro.
La neuroplasticidad nos enseña que el cerebro cambia con la experiencia — se moldea, se adapta y se fortalece según lo que vivimos.

Por eso, nuestro papel como padres no es solo acompañar, sino ser intencionales con lo que les ofrecemos día a día.